Hace algunos años en una boda uno de los invitados tras presumir de su formación (Teleco se autodenominaba y luego añadía; Soy ingeniero) me preguntó con una sonrisa de superioridad la cuestión que da titulo a este post. Yo le respondí que era persona.
En realidad pretendía ser una respuesta irónica, pero no lo fue, porque lo único que soy es eso, una persona, da igual lo que hayas estudiado, lo importante es lo que has vivido; la experiencia que te ha dado la vida y los aprendizajes que has extraído de esas situaciones.
No es que me avergüence de mi formación pero muy pocas personas la conocen más allá de mis padres,hermano y marido. Nunca he visto necesario ir enseñando mi curriculum por la vida para que se tenga más en cuenta mi opinión o para que se me diga que "parece mentira que seas esto y lo otro".
A mi siempre me ha gustado aprender y conocer nuevas cosas, aunque he sido muy pasota en todo lo que suponía memorizar, nunca me he querido estudiar los verbos en ningún idioma, ni fechas, ni nombres de reyes, reinas o autores importantes, solo he querido saber qué hicieron, la utilidad de lo que descubrieron, la repercusión de sus investigaciones, el motivo por el que sus vidas debieran de ser un ejemplo a seguir..Etc. Vamos, el cuajo del asunto, todo lo demás siempre me ha parecido paja, y la paja para los burros (acompañada de frutas y verduras).
Llevo 28 años dentro de la educación reglada, comencé en parbulitos con 3 años, aunque antes de esa edad ya hacia mis incursiones en el cole de mi hermano, deseaba poder ir al cole y aprender, poder usar esos juguetes y curiosear los libros, así que en cuanto puse un pie en ese pequeño paraíso, aproveche cada segundo...Iba con una buena base, mi madre me enseñó todo aquello por lo que yo mostraba curiosidad, pero en ese recinto había tantos estímulos...¡Disfrute muchísimo de aquella etapa! Mis únicos malos recuerdos son los relacionados con algunos compañeros que mataban animales e insectos, me sentía complice cuando no lograba salir la primera al patio para "salvarlos".
En primaria me sentí un poquito fuera de lugar, nuestra profesora de infantil era maravillosa y nos ofrecía a cada uno lo que necesitabamos, yo salí leyendo, sumando, restando e incluso haciendo alguna multiplicación porque me apasionaba y ella permitia que cada uno avanzasemos según nuestras inquietudes. En primaria tenían una programación que seguir, y yo me aburría bastante, sobretodo cuando nos pasábamos meses enteros trabajando contenidos que ya dominaba...Mi consuelo era que de vez en cuando aprendía nuevos contenidos..Alguna profesora criticó que yo supiera más de lo que me correspondía e incluso me llamó al orden cuando al preguntarme las tablas de multiplicar las cantaba ya que según ella lo hacia con recochineo..Y para nada..así las aprendí y así creía que eran..¡Cantando!
Según fueron avanzando los cursos mi interés iba aumentando, ya me gustaban más las clases aunque me repateaba que nos enseñaran verdades absolutas o algo que no nos iba a servir para nada, que no nos explicasen la utilidad de lo que debíamos aprender...así que fue donde tuve mis primeros baches...no quise aprenderme la tabla química ni los verbos en ningún idioma...Pero me empeñe en hacer el resto perfecto para al menos sacar un cinco..Entre tanto "ayudaba" a mis compañeros menos habilidosos a aprobar, porque por alguna extraña razón yo sentía que sin el titulo de EGB no tendrían muchas opciones en la vida, así que les chivaba, les hacia trabajos, chuletas...y así me estudiaba yo la lección, porque estudiar, lo que se dice estudiar, nunca lo hice, solo atendía en clase, pensaba sobre lo aprendido y explicaba a los demás.
En el instituto mi interés por el estudio era muyy alto, pero me defraudó bastante; no se ajustaba nada a mis expectativas...Eso unido a que estaba en plena adolescencia y la vida social y festiva me empezaba a atraer y que tenía que cuidar de familiares enfermos y de sus hijos me llevo a hacer mil piras y sacar buena colección de suspensos..Aunque nunca llegue a repetir porque tenía en mente que el instituto era un tramite que debía de pasar...Si hubiera sabido que daban becas y premios por sacar buenas notas otro gallo hubiera cantado, y no porque se premiara mi esfuerzo, sino porque podría lograr ir a la universidad, objetivo que aun no estaba muy claro por motivos económicos.
Tras hacer la selectividad en plenas fiestas de mi pueblo, sin haber estudiado, sin haberme perdido ni un día de fiestas y sin haber dormido, saqué mi "misera" nota: 5,6. Siempre les digo a "mis" alumn@s que era la reina de los cinquillos, solo necesitaba tener la puerta abierta, y el cinco era la llave.
Logré que me admitieran en una universidad privada, claro, con esa notita mía no había publica que me quisiera y entre becas, trabajo y ayuda de mis padres logré pagarme la carrera...Esa si era mi vocación y se notaba tanto en el tiempo que le dedicaba a investigar/estudiar como en las notas obtenidas. Pero terminé la carrera y sentí que yo no era lo que mi titulo decía, por eso me parecía absurdo y atrevido que tantísimas personas dijeran nada más acabar la carrera "soy tal o cual" y a veces, los profesionales con los que nos topamos solo tienen de profesional el titulo, y con eso no es suficiente.
Hice decenas de voluntariados y terminé siendo la responsable de algunos de ellos, más de una década en varias asociaciones, aprendiendo, formándome y haciendo tareas que hoy en día seria incapaz de hacer por el esfuerzo físico que suponía, pero por eso mismo los hice en aquel momento, porque sabia que ni mi vida ni yo seriamos siempre iguales.
Y un día di el salto al mundo remunerado y estable...Y cada mes que me ingresaban la nomina alucinaba, ¡Me pagaban por hacer lo que me apasionaba!¿Estaría eso bien? Ahora que ya llevo una década ejerciendo la profesión que se corresponde con mi primer titulo si que podría decir "Soy tal" pero no, sigo siendo una persona con la experiencia que sus 31 años le han dado..¡Y lo que me queda por andar y aprender!
Actualmente estoy a medio camino de mi cuarta carrera, y sigo diciendo que cualquiera puede sacarse una, dos o veinte carreras...Desde mi punto de vista obtener un titulo es relativamente sencillo, es cuestión de tiempo, constancia, dinero...Pero lograr la experiencia necesaria, la honestidad de reconocer que no es posible saber todo de todo, ni de nada, la empatia de ver como igual a quien tienes enfrente, el valor para mojarte...Eso no te lo da ningún titulo, por eso, opino que hay que respetar a los profesionales, si, pero teniendo claro que no son mas que nadie, que no saben más sobre ti o sobre tu familia que tú..Esa confianza ciega que a veces muestran las familias me da miedo, y aunque puedo entenderla, creo que un buen profesional siempre ha de trasmitir que nadie es infalible y que nadie puede tomar decisiones ajenas.
Y tú, ¿Qué eres?
